La Policía Civil de Brasil detuvo al médico José Emílio de Brito, acusado de la muerte de Marilha Menezes Antunes, una joven de 28 años que falleció el pasado 8 de septiembre durante una liposucción con injerto de glúteos en la clínica Amacor, en Campo Grande, Zona Oeste de Río de Janeiro.
La intervención, que Marilha eligió como regalo de cumpleaños tras cumplir 28 años el 1 de septiembre, terminó con una perforación renal y una hemorragia interna. Según el informe forense, la joven presentaba siete perforaciones compatibles con el procedimiento, de las cuales al menos dos penetraron la cavidad abdominal y provocaron la hemorragia fatal.
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Marilha Menezes Antunes, de 28 años, murió el 8 de septiembre en liposucción con injerto de glúteos. Foto:Vía O Globo. GDA
Irregularidades en la clínica
La clínica Amacor fue clausurada tras el procedimiento. Durante las inspecciones, la policía encontró medicamentos vencidos y condiciones sanitarias inadecuadas. El médico alquilaba el quirófano por 12 horas para operar a varios pacientes en un mismo día.
De acuerdo con los testimonios recogidos por la investigación, De Brito captaba clientes a través de redes sociales, evaluaba los casos con fotografías enviadas por una auxiliar de enfermería y tenía el primer contacto directo con las pacientes el mismo día de la cirugía. Además, él mismo aplicaba la anestesia.
La forense a cargo del caso afirmó que el médico debió remitir el cuerpo a la comisaría local para la autopsia en el Instituto Médico Legal (IML). Sin embargo, en el certificado de defunción consignó que la muerte se debió a “broncoaspiración y paro cardiorrespiratorio”.
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Antecedentes judiciales del cirujano
José Emílio de Brito ejerce como cirujano plástico desde 1976 y acumula más de diez procesos judiciales. En 2008 practicó una liposucción a una paciente de 35 años que murió por hemorragia interna.
En 2018 fue condenado por homicidio culposo a dos años y cuatro meses de prisión, pena sustituida por trabajos comunitarios y una multa.
En 2021 volvió a ser arrestado, esta vez por agentes de la Policía de Protección al Consumidor (DECON), debido a irregularidades detectadas en otra clínica en Vicente de Carvalho. Según la policía, intentó sobornar a los agentes para evitar la clausura del lugar. Ese proceso aún sigue en curso.
La cirugía fue un regalo de cumpleaños que terminó con perforación de riñón y hemorragia interna. Foto:Vía O Globo. GDA
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Voces de familiares y víctimas
La familia de Marilha cuestiona la atención recibida. Su hermana, Léa Caroline Menezes Antunes, declaró a la Comisaría de Protección al Consumidor que el médico tardó en pedir ayuda cuando su hermana empeoró:
“Tenía la vida de mi hermana en sus manos. Y en lugar de darse cuenta de que estábamos en una carrera contrarreloj, intentando trasladarla a un hospital más grande o aceptando la realidad de que necesitábamos salir de ese quirófano, continuó reanimándola durante 90 minutos”.
La mujer añadió que la hora de la muerte se registró solo por insistencia de la familia: “Solo declaramos la hora de la muerte porque la familia estaba desesperada, porque sabíamos que 90 minutos era el tiempo suficiente para que regresara”.
Otras expacientes también dieron su testimonio. Glaucia Priscila Alves Barbosa, ama de casa, afirmó que sufrió secuelas permanentes de una hidrolipoterapia: “El resultado es una cicatriz horrible que me impide usar bikini. Siempre se abre y sale pus. Los puntos se inflaman. Desde entonces, siguen inflamados”.
Otra mujer, que pidió no ser identificada, relató al portal ‘g1’ que fue operada con dolor porque la sedación aún no había hecho efecto: “Me obligaba, me obligaba, y yo gritaba, gritaba, pensando en Menezes, sin poder verla en ningún momento. Entonces dije: ‘Dentro de un rato me vas a perforar’”.
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Quién era Marilha Menezes Antunes
Marilha trabajaba como técnica en seguridad del trabajo en la aerolínea Gol y era madre de un niño de 6 años. Según contó su hermana Carolina al portal ‘g1’, la joven se había realizado todos los exámenes previos y gozaba de buena salud.
“Mi hermana era la vida. La llevé para cumplir un sueño y murió”, lamentó.
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*Este contenido fue escrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de conocimiento público divulgado a medios de comunicación. Además, contó con la revisión de la periodista y un editor.